LA CONVENCIÓN Y LAS TRES NUEVAS RUTAS DE TRATA DE MUJERES
Por: Ani Lu Torres
Esta es la historia de Pamela, una joven promedio, como tu o como yo. Cuando ella supo que sus padres ya no iban a poder pagarle la universidad su alma se derrumbó, el sueño de ser una ingeniera se evaporó a los pocos meses de haber iniciado. Los días en casa era de constante trabajo. Mañana y tarde, tenía que hacerse cargo de la cocina, barrer la sala, lavar la ropa y sobre todo, cuidar a sus tres hermanitos. La carencia económica obligó a sus padres a retornar al campo y dejar a la hija mayor, Pamela, de 18 años, hacer las veces de madre. Pero la bella joven, sobre todo «joven» y astuta pronto encontró la forma de apoyar a su familia, consiguió un trabajo – así lo llamaba ella – donde ganaba más de lo que sus padres podrían ganar en tres meses de trabajo. Su salario – le habían prometido – superaba los tres mil soles y sólo tenía que atender en una tienda. Cosa fácil para una chica. Ella aceptó. Al poco tiempo su historia dio un vuelco: era una prostituta.
La situación de Pamela, una joven quillabambina de 1.57 metros, es la figura literaria que representa a decenas de jóvenes en la provincia de La Convención. Señoritas que atravesando una presión económica, se levantan y tratan de salir adelante. Se leen todo el mural de avisos de trabajo en la av Bolognesi de la ciudad de Quillabamba, tratando de ubicar alguno adecuado para ellas. Lamentablemente, la situación de desesperación es aprovechada por los «captores», varones y mujeres conocidos en el mundo de la delincuencia por captar a jovencitas para luego explotarlas sexual y laboralmente.
Las rutas de la pobreza
En la provincia de La Convención se acaban de identificar tres nuevas rutas de trata de mujeres. Si usted, amigo lector, pensaba que eso solo sucedía en Puerto Maldonado, en Madre de Dios, se equivoca, y esta a punto de conocer la otra cara de lo que está generando el crecimiento poblacional que atrae nuevos problemas sociales, como la trata ¿Estamos preparados para enfrentarlo?
Según Jhony Farfán, psicólogo y encargado del estudio sobre las nuevas rutas de trata de personas en la provincia de La Convención – Cusco, su informe arrojó que existen tres nuevas rutas de trata: el corredor turístico Santa María – Huayopata – Santa Teresa; corredor gasífero, Echarati – Kiteni, y también dentro del distrito de Santa Ana.
«Este estudio reveló que hay tres rutas, la del gas de Camisea enfocado al distrito de Echarati y se concentra en el centro poblado de Kiteni, donde se ha incrementado los bares, night clubs, prostitución. Las jóvenes son en su mayoría del Cusco, del bajo Urubamba, principalmente de Kirigueti y Miaria», señala.
Ruta de los campamentos
Se le denomina así por los turistas mochileros que van haciendo campamento mientras recorren una ruta turística, por ejemplo, la que va de Santa María – Huayopata – Santa Teresa.
«La presencia de turistas también genera presencia de servicios sexuales, quienes lo brindan son jovencitas de Quillabamba y Cusco, que incluso son captadas por las mismas agencias de turismo» – señala Farfán.
Pero también existe la ruta de Quillabamba – ciudad. Por el desarrollo económico y la oportunidad laboral, muchos jóvenes han llegado a buscar un futuro mejor, sin embargo, se ha evidenciado el incremento de bares y cantinas en los últimos años. Se evidencia la explotación sexual en las calles, en pleno centro de la ciudad. Lugares como Jr 25 de julio, el terminal de Cusco, donde por todo el perímetro hay chicas mayores y menores, la mayoría del Bajo Urubamba.
…»Y cuando estos chicos se meten es para mejorar su economía, muchas de ellas son estudiantes porque sus padres no tienen los recursos».
¡Denuncia!
A finales del 2015, se creó en Cusco la fiscalía de prevención de Trata de mujeres y explotación sexual. Hoy en día ya tienen centenares de casos que están en proceso de captura para las personas que cometieron el delito. Mensualmente la fiscalía trata de hacer campañas en el interior del Cusco para sensibilizar a la población e invitarlos a que denuncien estos hechos que va contra la integridad y vida de una persona.
Gratuitamente puedes denunciar mediante la Líne 1818 del Ministerio del Interior